
Este proyecto lo sacó al bullpen el senador Santiago Zorrilla, que propone que los padres tengan la obligación de enviar a sus hijos a la escuela mientras practican; también que los prospectos ingresen a las academias a los 15 años; que todos los programas independientes se regularicen en el Ministerio de Deportes; multas de hasta 1 millón de pesos para los entrenadores que tengan a los prospectos metiendo esteroides y otras sustancias prohibidas; y que si un prospecto firma con algún equipo siendo menor, los padres tienen que crear un fideicomiso con el 40% del bono de la firma y se le devuelve al jugador cuando cumpla los 18.
El fidecomiso no es más que un contrato en el que una parte le entrega bienes o derechos a otra (la fiduciaria) para que administre la cosa entregada.

NO ES UN «FLY AL CATCHER»
Aunque la iniciativa tuvo el visto bueno en el mundo del béisbol dominicano, también le hicieron sus observaciones. Por ejemplo, Julio Noboa, el comisionado Nacional de Béisbol, cree que el monto del 40% es muy alto para el fideicomiso porque los jugadores tienen «compromisos por cumplir con la familia» y también entregan entre un 30% y 50% del bono a los entrenadores, así que fideicomisar el 40% los dejaría con muy poco dinero para resolver con sus «responsabilidades familiares».
Otro punto que también entró en el debate es que los prospectos entren a las academias con 15 años, porque dicen algunos entrenadores que es mejor que lleguen más chiquitos para poder prepararlos bien y que estén ready para firma a los 16 o 17 años.
Fuente: El Brifin.