
Se pretende sensibilizar a la opinión pública acerca de las situaciones de abuso, degradación y elevados costos de renta que afrontan las personas que no poseen una vivienda propia.
Es común observar los abusos cometidos por los propietarios de bienes de renta para obtener mayores rendimientos de su inversión, mediante un incremento de los precios por concepto de alquiler de viviendas.
Los inquilinos que no pueden asumir el pago elevado de un alquiler deben mudarse a otras viviendas ubicadas en lugares más lejanos, con espacios reducidos y en condiciones deplorables, mermando su calidad de vida. En la mayoría de los casos deben asumir la totalidad de los gastos de los dueños del inmueble, referidos al mantenimiento, reequipamiento y reparación del mismo.

En la actualidad existen instrumentos legales orientados a regular el arrendamiento inmobiliario, que incluye los derechos y deberes de los inquilinos.
Es de vital importancia que los gobiernos actualicen estos mecanismos legales que favorezcan al inquilino, mediante la regulación de los precios de alquiler, evitar los desalojos, así como implementar planes nacionales de vivienda y de créditos accesibles para la adquisición de viviendas propias, especialmente dirigidos a personas de escasos recursos económicos.
Fuente: diainternacionalde.com