Vamos a hablar de los resultados de una encuesta que hace la corporación Latinobarómetro. Esta es una ONG chilena que investiga el desarrollo de la democracia, la economía y la sociedad en general en los países latinoamericanos. Este estudio en particular se hizo encuestando a casi 20 000 personas en 17 países de la región, entre febrero y abril de este año.
¿QUÉ ENCONTRARON?
Que la democracia va en decadencia en América Latina; en algunos países ya desapareció, y en otros está en peligro de extinción o al menos en una situación de vulnerabilidad. El estudio llama a este fenómeno «recesión democrática», que se manifiesta en un bajo apoyo a la democracia, una indiferencia hacia el tipo de régimen o de gobierno, y la preferencia por actitudes autoritarias (o al menos la famosa «mano dura»).
Además, el desempeño de los gobiernos democráticos y la imagen de los partidos políticos se han desplomado. La gente le está dando más importancia a las figuras, y menos a los partidos. Eso quiere decir que somos ahora más susceptibles al populismo y a regímenes no democráticos.
¿Y NOSOTROS LOS DOMINICANOS?
Hay 3 indicadores: preferencia por el autoritarismo, aunque se apoye la democracia e indiferencia hacia el tipo de régimen que haya (así como lo lees). Entre 2020 y 2023, nosotros pasamos en esos indicadores, respectivamente, del 13% al 21%; del 50% al 48%; y del 25% al 27%. Eso quiere decir que cada vez más gente prefiere el autoritarismo (sobre todo los jóvenes) y menos gente prefiere una democracia (o les da lo mismo).
Pero el resultado más revelador no está ahí, sino en que al 63% de los encuestados en RD simplemente no les importa si hay un presidente autoritario o de mano dura, siempre y cuándo solucione los problemas de siempre: justicia, igualdad, seguridad, pobreza, etc. Esto es una consecuencia directa de que las democracias hayan fallado en muchos casos en resolverle a la gente, y nos convierte en un terreno fértil para los discursos antisistema y populistas, que eventualmente se pueden tornar en autoritarios o dictatoriales.
Fuente: El Brifin.